Hoy va una primicia, seguro que es la primera vez que hacemos esta combinación … que considero irresistible: Kant -sí, Kant, el de la crítica de la razón pura, ¿recuerdan? y Anais Nin, esa musa maravillosa llena de personalidad y de glamour. No sé, pero me extraña que se le haya ocurrido a alguien hacer este combinado. Pero nunca se sabe en este mundo, donde hay lugar para todo y es difícil decir nada nuevo y menos anunciarlo como primicia, espero que nadie se meta conmigo por la autocalificación.
El título de la entrada casi se asemeja al chino, y tiene un cierto parecido con el Jin-Yang, ¿no creen?. Un cocktail explosivo, sí, explosivo. ¿Se puede beber? Pues a mi me parecen un buen complemento. La vitalidad de Anais con la contundencia de Kant. Un buen combinado, échele un poco de limón, y un toque de grosella, si puede ser salvaje, y tendrá que prepararse para la ingesta.
Me parece bien el combinado, pero más interesante me parece la segunda máxima. Creo que Anäis tiene razón al afirmar que las cosas las vemos a través de nuestra impresión y de cómo somos. Por eso el mundo es tan enriquecedeor, cada uno fabrica su imagen, su mundo, su vida según quiere o en ocasiones como le gustaría o como reflejo de uno mismo. Creo que no ver la realidad tal y como es, nos ayuda a ser creativos, a rejuvenecer y a tener fantasías.
Coincido plenamente con tu juicio, pero tal vez estoy condicionado por mi percepción sensible, como diría Mao Tsé Tung, y por cierta tendencia a aceptar no sólo mi subjetividad, sino la de los otros. Kant es rotundo y moral, muestra la idea de un padre que sabe lo que quiere y al que se puede seguir. Anäis el de una mujer con toda la aventura en el cuerpo que ella misma tenía. En nuestra sociedad, «huimos» de la misma idea de padre y de su representación kantiana, parece que ya no es necesario más que para denominar lamentablemente a un impreso con el que hacemos la declaración de la renta. Sin embargo, Anäis representa la libertad de la mujer, es su antecedente y nos gusta porque está presente y muy presente en nuestra cultura dominante, y bien venida sea. Sin embargo, y ahí está la combinación, necesitamos de lo que ya no tenemos: padre kantiano; y también, de lo que aspiramos, de una mujer proactiva, libre e independiente. Olvidar lo primero es como construir una casa sin cimientos.
Yo intentaria introducirlos en una fondue de visiones. Se puede obrar como si nos guiara una ley universal que no es otra que la de ser como uno realmente es. Como de cia Confucio dentro de cada hombre se encuentra el camino hacia el virtuosismo y a cada momento si lo sigue, sus obras sabra si son la correctas universalmente y para el mismo. Esto queda algo diluido en esta realidad social tan confusa. Pero aunque solo sea como simil a mi me recomforta pensar que pueda ser asi. Tal vez no es una mezcla sino 2 prismas de una realidad. Humildemente.
Si, ciertamente, la frase de Confucio puede ser una buena síntesis de la complejidad de las otras dos, más decantadas cada una de ellas, «dentro de cada hombre se encuentra el camino hacia el virtuosismo, y si lo sigue, se sabrá que sus obras son correctas universalmente y para él mismo» Precioso y profundo. ¡Tenía que ser Confucio! el gran mezclador, el práctico con moral, el líder al servicio del pueblo …… ¡Qué gran pensador ….! Menos mal que ahora se ha puesto de moda gracias a los éxitos de los chinos como país emergente.