«La sabiduría es hija de la experiencia» decía Leonardo da Vinci

«La experiencia es la madre de la ciencia» dice un refrán popular

Si la experiencia es la fuente de todo lo que buscamos, conocimiento y sabiduría, como es que se tiene tan poco en cuenta, y se prefiere «reinventar» antes que imitar, crear antes que saber contemplar y desarrollar lo ya hecho, …. ¿nos creemos dioses?

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Y, por otra parte, ¿por qué no vivimos conscientemente? ¿por qué aprovechamos tan poco nuestra propia experiencia y la de los demás? … ¿miedos? ¿falta de constancia? ¿subvaloración? ….. Lo cierto es que la memoria sistemática sería la forma de mantener nuestra experiencia, y poder analizarla y comprenderla, y ser así fuente de conocimiento. Pero …… somos tan poco constantes, nos cuesta tanto trabajo aprender de nuestros errores, que como dice Nietzsche son «nuestros mejores maestros», pero nos les hacemos caso.

Quién aprende de sus errores, edifica su experiencia, su conocimiento y su sabiduría.

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3 comentarios en «Experiencia»

  1. Será porqué en realidad no hemos llegada a la sociedad del conocimiento y solamente estamos inmersos en una aparente transción de la sociedad de la información a la sociedad de la ????

    Lo cierto es que lecturas como La Quinta Disciplina de Peter Senge te animan a creer que hoy en dia es necesario construir organizaciones que aprenden… pero el día a día se entozude a mostrarnos estilos de dirección tradicionales capaces de desmoronar los sueños y motivacion de muchos…

    no sé, será que la sociedad del conocimiento es un proyecto de futuro a la vuelta de la esquina…

    será que sí somos una sociedad informacional pero a pesar de los cientos de artículos, seminarios y jornadas que intentan incitar y hacer ver, y valorar, el valor añadido de una sociedad basada en el aprendizaje y la generación del conocimiento… aún y eso… parece que nos enquilosamos en organizaciones tradicionales jerárquicas basades en una cultura y valores dónde se premia más la individualidad, el secretismo, el castigo, l’autoridad, la competencia, la no comunicación…

    será, será

  2. Hoy, valiéndome de experiencia ajena en forma de prosa, es como comentaré.

    Como dice la canción del artista de «Poblesec»:

    Si la veteranía fuese un grado;
    si no se llegase huérfano a ese trago. Si tuviese más ventajas
    y menos inconvenientes. Si el alma se apasionase, el cuerpo se alborotase y las piernas respondiesen. […]
    Quizás llegar a viejo
    sería todo un progreso,
    un buen remate
    un final con beso.

    Y me quedo también con las palabras del Proverbio (1:5): “El sabio escuchará y absorberá más instrucción, y el entendido es el que adquiere dirección diestra.”

    O el 3:13,14: “Feliz es el hombre que ha hallado sabiduría, y el hombre que consigue discernimiento, porque el tenerla como ganancia es mejor que tener la plata como ganancia y el tenerla como producto que el oro mismo.”

    Para aquellos quienes crean/mos en la superioridad de un Creador… sobra decir dónde ir a buscar esa anhelada sabiduría que de otra manera sólo podría «maldarla» el paso del tiempo o experiencia.

    Aprender del pasado, de los errores ajenos y dejarse instruir por aquel que sabe cómo estamos hechos… ese es, en mi opinión, el mejor «atajo» para evitar tener que experimentar por uno mismo lo que «funciona» y lo que «no funciona».

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