Primero, a través de la coherencia , del ejemplo, de la correspondencia, de los valores aplicados, no sólo declarados.
La mejor estrategia de innovación es la que encuentra en valores básicos, socialmente aceptables, su soporte. Yo suelo utilizar básicamente cuatro: RESPETO, RESPONSABILIDAD-COMPROMISO, MEJORA CONTINUA Y GRUPO-CALIDAD (lo que nos lleva a la positividad y los límites indirectamente) .
• Todos exigimos de los demás respeto a lo que hacemos, es el fundamento de la democracia y de la dignidad del ser humano, respetarse unos a otros, aceptar la existencia del otro; y también de la libertad , tan necesaria para avanzar en este terreno de desarrollo humano y social.
• Mi estrategia para llegar al compromiso es a través de la responsabilidad ; y la responsabilidad implica libertad de acción contando con unos recursos para llegar a unos objetivos concertados .
• La mejora continua es la mejor expresión de la “posición depresiva” kleiniana, que a su vez es el basamento del conocimiento .
• Y por último, el grupo expresa la máxima calidad de las cosas, muy por encima que el individuo, y el grupo incorpora dos valores específicos y también aceptables que se elevan sobre los que ya hemos visto de respecto, compromiso y mejora continua:
o la positividad , no exenta de crítica, pero en lo substancial positiva; y
o la percepción de que somos limitados, aunque siempre nos asombremos de lo que hemos avanzado, pero si miráramos para atrás nos daríamos cuenta de que ni por aproximación hubiéramos podido imaginar lo que hemos hecho hasta aquí, aunque claro, dentro de veinte años estaremos en otra dimensión incomprensible ahora para nosotros (eso que decía la zarzuela: “hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad ….”, y que se dice en todas las épocas).
Segundo, trabajamos a través de la generación de espacios de intercambio y de conocimiento, que elaboren lenguajes comunes y creen constantemente espacios de confianza y de colaboración. Si a una persona no la conocemos, podemos temerla y quizás prepararnos para lo peor con ella; las cosas se arreglan hablando, el anuncio decía: “en las distancias cortas es donde uno se la juega”, los temores desaparecen dialogando, intercambiando experiencias, abriéndonos a los otros.
Nosotros facilitamos esos espacios de colaboración, los dotamos de una metodología que les permite aflorar lo mejor de cada uno, y sin perder ni un ápice de su conocimiento, encontrar en las experiencias de otros el soporte para proyectarse a nuevas experiencias. Pueblos intercomunicados son pueblos que no hacen la guerra.
Los pueblos que desarrollaron más pronto un espíritu comercial casi no guerreaban, sólo se defendían de los ataques de aquellos que no habían llegado tan lejos, y todavía vivían una mentalidad de gana-pierde. Fenicios y griegos en la antigüedad clásica; venecianos o genoveses en el renacimiento; holandeses en la edad moderna; son ejemplos de lo que estoy diciendo.
Tercero, todo ha de apoyarse en el cemento de una organización: en la CALIDAD y esta se ha de hacer posible a través de un PROYECTO ESTRATÉGICO que nos oriente al CLIENTE. Si tenemos claro que el cliente es el destinatario, y ya no sólo la necesidad, sino la oportunidad decisiva para nuestra actividad, la calidad centrará nuestras expectativas y cliente-calidad, se unirá a comunicación forjando la ya famosa plataforma de las tres ces: Cliente, Calidad y Comunicación, como variables estratégicas para la innovación, para la satisfacción y para la productividad.