De la Espiga a la Espiral
(1995)
La innovación es una necesidad global del estado de las cosas en el mercado mundial; dicho en otras palabras, de los niveles reales o sentidos de competitividad empresarial.
Las empresas aspiran a la innovación como receta mágica «que nos saque de pobres», como las quinielas o la loto. Se piensa en la innovación como algo imprescindible y necesario de inmediato para «llegar antes» o «ser más» o «conquistar mejor» clientes o mercados. Y hasta aquí sólo un punto de preocupación: se vive la innovación más como ideología que como proceso complejo, más como un «chasquido de dedos» que como un «arremangate y trabaja», más como algo puntual e inmediatamente transformador que como un mundo de incertidumbres sólo superadas por el esfuerzo, y así nos va el cuento.
Cuando nos presentan una nueva forma de hacer las cosas, como estamos esperando algo salvador, hacemos «lecturas» ideológicas de esas nuevas formas y en lugar de contemplar el conjunto, nos perdemos aspectos que aún estando contenidos en el nuevo método, sólo son un aspecto parcial de lo propuesto.