Una de las razones por las que no hay que extenderse en muchos detalles, sino sólo aquellos que se pueden completar por su propia acción investigadora es precisamente por esto.
Si todo es fácil y dicho, no suele haber dudas, ni consecuentemente necesidades, y las necesidades son las que favorece el intercambio y la compartición.
Lo vemos en la sociedad actual dónde las necesidades se esconden o se disimulan o en algunos casos, no existen, y las relaciones cercanas están poco desarrolladas. La necesidad, que viene a representar una mínima catástrofe o un muro que hay que saltar, sirve para facilitar los procesos en red. Por ejemplo, la gran soledad en que se vive en el mundo actual, ha permitido desarrollar medios de intercomunicación, como chats, Facebook, etc. que “cubren” esa necesidad malamente, pero al menos la cubren.
Un profesor en mi opinión no ha de excederse en los detalles de su discurso, sino que ha de dejar incógnitas, incertidumbres, cosas para ser estudiadas, “asignaturas pendientes”, …. Para que los que hayan sido inducidos e interesados, busquen, encuentren y se sientan satisfechos de que lo conseguido es producto de su esfuerzo, y lo valoren en consecuencia
Terminar un tema haciendo una pregunta y dejándola pendiente, puede ser una buena estrategia …. no es de mi estilo, porque siempre me gusta terminar las cosas, pero he visto y aprendido de profesores que gustaban de terminar preguntando …. y hasta diciendo que se resolveria la clase siguiente.
Mejor presentar las cosas… como creciendo, desde lo real a lo que intenta explicarlo, y no dar demasiados detalles, sobre todo históricos ….
Las preguntas, según mi decir, son al principio, y abiertas, y en cierto modo, ambiguas ……