Un ejemplo irlandés para conseguir una uniformidad que no siempre se persigue con el trabajo en grupo, pero que queda bien cuando hablamos de trabajo en equipo. La uniformidad suele gustar, lo cual no quiere decir que satisfaga más a los participantes, que son así sólo parte de un conjunto que actúa como equipo. Un baile celta siempre viene bien, de todas formas, e indudablemente es un buen conjunto.