– Pasar del individuo al grupo
Del mundo limitado por el propio individuo, su particularidad y sus razonables desconfianzas hacia el otro, y la
lucha y la competencia como respuesta, pasar al grupo, al compartir, a la «aparición» del otro y su
importancia en cada uno, a la cooperación y colaboración
– Pasar de la homogeneidad y el pensamiento único a la heterogeneidad en la igualdad social
O lo que es lo mismo de la desigualdad producida por una nota a la heterogeneidad de contenidos, de vivencias,
de experiencias que son las que permiten la auténtica igualdad social, la que proviene de la diversidad y
produce diversidad.
-Pasar de la subordinación a la autonomía y libertad
Subordinados, o al menos, dependientes, somos cuando sólo escuchamos a ponentes «elegidos»; libres somos
cuando podemos expresarnos, escuchar, hablar, interactuar, y eso en un proceso no-continuo.
– Pasar de la suma de cosas, especializadas, que son «conocimiento» o sumas de conocimientos, al mundo de las relaciones, entre personas, entre cosas.
No queremos acumular más y más cosas, más y más innovación aisladas que no producen más que confusión,
sino que queremos ver la relación entre una cosa y otra, entre una innovación y su aplicabilidad global, entre
una TIC y el papel que puede jugar en los espacios de aprendizaje.