“No son las malas hierbas las que ahogan la buena semilla, sino la negligencia del campesino” Confucio
Negligencia que casi siempre va unida a prepotencia e ignorancia de los que se creen que lo saben todo. ¿Cuántos hay en este país de este tipo? Muchos, demasiados. Con tanta corrupción, no hay tiempo para hacer las cosas bien. Todo es defenderse de la corrupción generalizada de un país que va en caída libre.
La crisis se la encasquetamos a unas malas hierbas, a Zapatero y a los banqueros afuerinos, como dicen los chilenos. En el aborto la culpa es también de Zapatero y de los obispos que piden más de lo que deben (hay que decirlo sin decirlo). El ébola, y por fin ser la primera en algo (aquí en dejarla entrar como por su casa), será culpa de los «negritos» africanos …. y así …. siempre llevando la «culpa» -porque se trata de culpables, no de responsables- a otros, mientras adentro, con la mayor de las negligencias han puesto al país en regresión y al paro en una variable que no existe en ningún país del mundo de ese nivel; con el aborto han producido una división social insostenible; y con el ébola han puesto al país en alerta rojísima ….. Menos mal que esta primavera ha empezado a materializarse un aire fresco de renovación, de esperanza, no precisamente por los que están en el poder o en la «oposición», sino por jóvenes que están renovando el panorama, y esperemos que todavía lleguen mucho más lejos.