No escuchamos, no escuchamos, sino que interrumpimos o monopolizamos, especialmente los líderes -sean profesores o sean dirigentes del tipo que sean- y tenemos que aprender algo esencial que es ESCUCHAR, y saber ver en los demás una gran oportunidad para aprender y para enriquecernos con sus aportaciones. Esto en las aulas o en las oficinas es muy difícil de lograr en nuestro país, tan peculiar en tantas cosas.

Leer más