¿Apretarse el cinturón? Me suena, nos suena …… Un poco de eso se precisa, pero como siempre «nos ha pillado el toro» y aún así seguimos embarcados en una fiesta continua. Parece que nuestro destino sea «no pegar golpe, y ya veremos». Nos ha pillado el toro, expresión realmente inadecuada por lo de siempre, por nuestra fantasía y nuestra incapacidad para ver la realidad. Cuando estamos en un punto, nos parece que eso va a durar toda la vida, y claro, el río de la vida sigue su curso y nosotros nos quedamos tan tranquilitos, acampados y de picnic, mientras otros muchos no paran de dialogar con el curso del río. Cuando nos damos cuenta, y después de la siesta larga …. resulta que el río se ha ido tanto, que es preciso tomar medidas, y las medidas siempre son las mismas, algo profundamente lamentable que llamamos «cambio» o reajuste o apretarse el cinturón. Ninguna de esas políticas es adecuada. El ejemplo de Zapatero y del gobierno socialista en los últimos años es un ejemplo adecuado a la cultura donde nos movemos, ¿podía hacer Zapatero y los suyos algo diferente? No, sencillamente no, porque nadie le perdonaría que se «adelantara al río», sin «ninguna razón» (sic), sólo cuando el río se nos había ido, y muy lejos, entonces, declarando uno y otro día que el río estaba allí todavía y que podíamos seguir «siesteando», por fín, y avisados por los de fuera, o más bien, chantajeados por los demás, que estaban ya trabajando, nos dimos cuenta de que las cosas eran bastante peores que lo que creíamos o queríamos creer, y claro, lo que pasó ya lo sabemos. Depresión para años. Ese es nuestro cambio. Y como no le vaya bien, por una extraña parábola, a las «locomotoras occidentales» -USA y Alemania- y muy bien, estaremos estancandos no se sabe cuánto. Y sin embargo, seguimos celebrando a tope nuestras fiestas, viviendo muy bien, mucho mejor de lo que nos corresponde, y yéndonos de paseo vacacional como si nada, o casi como si nada, al menos para una buena parte de la población. Y todos, en la medida de lo posible, aprovechándonos de la posición que tenemos. Hasta el líder de la oposición «veranea» gratis en las Canarias, y dice que está «trabajando» por allí, con alguna cosita que le organizan para «salir en la foto». ¡Qué país!. Un país profundamente primitivo. Un país como éste, donde parece que todo el mundo es ateo, y sin embargo, la semana santa está en la mayor pico de audiencia del mundo, y si se anula una procesión porque la luna llena nos ha enviado sus lluvias, hasta se llora porque no «ha podido salir la cofradía» a dar el paseillo anual. Estamos locos, o al menos, a mí me lo parece.
Y lo cierto es que tenemos que volver a apretarnos el cinturón y ya van tres países que tienen condiciones de «apretamiento» -Grecia, Irlanda y Portugal, sin olvidar Islandia que está cerrada por «listillos»-, hay un montón de países europeos con gobiernos hacia «las cavernas» o en las cavernas, no parece que la oposición de la segunda internacional pueda hacer nada, porque se les han visto todas las costuras sueltas, mucho más de lo correspondería a una posición reformista y potencialmente innovadora, que sólo parece serlo en la idea de la idea, pero no en la práctica, donde se parecen. Impresionante el problema que tenemos con una Europa desgajada y que ha pecado de las mismas fantasías grandiosas que lo que es característico en nuestros lares: ¿cómo es posible que hayan querido multiplicar casi por tres el número de países participantes, así por las buenas? ¿Cómo es posible que nadie se haya opuesto, nada más que al ingreso de Turquía? ¿Cómo es posible que hayamos sobrevalorado tanto nuestras propias fuerzas? Yo no lo entiendo, yo no lo entendí, y escribí sobre eso hace años, cuando nos plantamos en los 27 países …. y ahora tenemos lo que tenemos. Al capitalismo alemán tal vez le haya venido bien todo esto, pero a los demás no. Tal vez sea parecido a lo que ocurre con los tipos de interés …. a los alemanes les puede venir bien, pero los demás, a apretarnos un poco más el cinturón, estando bajo observación atenta de ese monstruo del sistema capitalista -ahora renovado-, del FMI y de los otros muchos controladores que necesita el sistema para que la gente adelgace y deje de festejar ….. Y, no lo olvidemos, aunque las declaraciones internas son de que estamos muy bien, lo cierto es que los próximos somos nosotros, y estamos muy cerca, y con nosotros, se acabó la UE, es algo deprimente decirlo, pero alguien tiene que hacerlo.