«La moneda mala expulsa del mercado a la mejor» Ley de Gresham …. en el siglo XVI …. no sólo vale para cuestiones monetarias y financieras …. sino casi para todo.
Las malas personas también ocupan el sitio de las buenas. Las buenas suelen ser, como decimos en mi tierra, «mais coitadiñas», menos visibles, y casi siempre, trabajan y se esfuerzan más, tienen más iniciativa, les gusta más aprender, son buena gente con los demás, etc. ….. pero «los malos» no hacen casi nada de eso, y por eso tienen mucho más tiempo para intrigar, para «hacerle la pelota al jefe», para «estar», para «ser visibles» y estar en el momento oportuno ….. y al final, en la mayoría de los casos, son las que ganan. Es cierto que su ganar es en el fondo un gran fracaso, pero socialmente son los fracasados sociales, los más egoistas, los menos solidarios, los que se les ve …. y hasta pueden parecer como solidarios, sociales y caricativos …. en función del dinero que pongan después en fundaciones u otro tipo de emprendimientos sociales. Total, que los malos expulsan del mercado a los mejores, a los esforzados, a los trabajadores, a los ……. En fin, creo que todos los que me leen, me entienden. No he tenido que forzar demasiado la ley de Gresham.
He encontrado esta versión de «La mala moneda»:
Parece que Concha Buika, española, pero de origen guineano ….. es una buena cantante: http://es.wikipedia.org/wiki/Concha_Buika
Y eso es …. «que de mano en mano va … y ninguno se la queda …. que de mano en mano va … y ninguno se la queda ….».
Estos días he pensado mucho en torno a este tema …. sobre todo, recordando aquellos que cualquiera representaría como malos y lo bien situados que están …. han tenido tiempo para hacer lo que hay que hacer para triunfar.
Siguiendo con el paralelismo, los malos de la película, los especuladores de Wall Street, son los que han ganado más con esta crisis que han creado ellos, igual que los banqueros y muchos de sus grandes clientes. Los que han perdido son los trabajadores, los jóvenes, los que lo pasan bien trabajando, los que son responsables y hasta morales en sus comportamientos …. esos, en la mayoría de los casos, no culpables ni responsables, de todo lo acaecido, esos si que pagarán las consecuencias.
Estoy pensando en las personas de mi generación que llevan treinta y tantos o cuarenta y tantos años trabajando …. y … bueno, que voy a decir, todos lo sabemos.