Grupo de ataque-fuga, linea Maginot y quinta columna

Los grupos de ataque-fuga de Wilfred Bion se suelen representar como grupos de «supuesto básico» en la terminología del autor y acaban conformando, combinados con los de «dependencia» y los de «pairin-emparejamiento», los grupos naturales básicos, y cuando se dice naturales, más bien había que decir sociales, porque responden a los impulsos primarios y espontáneos de organización de grupos en sociedad. Los animales tienen muchas veces formas de organización grupal mucho más complejas que las que alcanzamos los seres humanos.

carnavales.jpg

Dicho esto, un grupo de ataque-fuga se define esencialmente como un grupo que ataca o defiende, y para ello utiliza líderes que ha aceptado y hasta buscado el grupo para llevarlos a un fin determinado. Normalmente se suele poner de ejemplo típico al ejército, con una estructura muy piramidal, jerarquizada, y con líderes «incontestables» que coordinan o planifican los ataques y supervisan sus procesos o bien, menos frecuentemente, líderes que saben defender, que saben replegarse, que saben «tirar para atrás», sin demasiadas víctimas en el proceso. Por ejemplo, Napoleón, en general, era un gran líder de ataque, pero era muy malo para las retiradas …. se nota que no les gustaban mucho. El grupo de ataque-fuga es muy jerárquico y muy de líder …. con lo que es posible que el grupo acabe idealizando a su líder, y lo convierta en un «cuasi-dios», cuestión que puede venir igualmente refrendada por las «aspiraciones» y expectativas del mismo líder. Las organizaciones y específicamente, las grandes organizaciones y empresas en general, se acomodan muy bien a este tipo de grupo natural, de supuesto básico, aún cuando se combinan con las otras dos formas, en las que no me voy a extender para no hacer excesivamente larga la entrada.

Sólo quería introducir al tema, de una forma en cierto modo simplificada, la realidad del grupo de supuesto básico es algo más compleja, pero puede servir como introducción.

La linea Maginot fue la famosa línea de trincheras que forjaron los franceses en la primera guerra mundial, consistente en una sucesión «paralela» de trincheras que iban enfrentando al enemigo. Quedó para la historia en un plano parecido a lo que representó «la armada invencible», como algo inatacable, insuperable, pero luego los alemanes la superaron después de intentarlo una y otra vez. De esa forma, la linea Maginot pasó a la historia no por insuperable, sino por supuestamente o ideologicamente insuperable, pero realmente superable, hasta con relativa facilidad. Creo que es evidente el paralelismo con la Armada «invencible».

La quinta columna es una expresión hecha que configura la idea de traición: la idea de tener en el enemigo adentro. En Wikipedia dicen que la expresión nació del general Mola, que hablaba de la quinta columna que los que querían derrocar la II República, tenían en Madrid, operando a favor de las «cuatro» columnas de ejercito de las que disponían los sublevados.

Por tanto, la quinta columna también podía entenderse como la quinta trinchera ….. que estaría en las filas del atacante a la línea Maginot, o bien podía también representarse como la quinta trinchera real … es decir, una línea de trincheras que intentaría agotar al enemigo en su constante ataque contra la gran línea Maginot.

A los grupos de ataque-fuga les apasionan las líneas Maginot, aunque prefirirían que fueran menos densas en la organización de trincheras y sobre todo, algo más lineales, porque así podrían atacarlas más «científicamente». Sabemos que un grupo de ataque-fuga, con el lider adecuado puede saltarse la línea de Maginot, pero no sabemos si podría con los «infiltrados». Los infiltrados casi siempre son del mismo bando que el grupo de ataque-fuga, pero tienen horizontes y objetivos distintos, porque son los «descontentos», los «marginales» …. hasta probablemente algunos de ellos sean disidentes con la necesidad de atacar a un enemigo real o supuesto y que prefieren la paz o que sencillamente no están de acuerdo estrictamente con el líder y le hacen frente, «traicionándole», en cualquier caso ….. como todo lo interno, es siempre más grave que lo externo. Se suele decir que los enemigos hay que tenerlos enfrente, pero tener el enemigo en casa, siendo o pareciendo ser amigo …. es terrible y desmoralizante.

El grupo de ataque-fuga necesita de jerarquía y de pensamiento único. Toda distorsión de esa orientación acelera sus paranoias, miedos, y acentúa su prepotencia, su jerarquía, sus órdenes, y como consecuencia, sus urgencias. Y hacer cualquier cosa con urgencia casi siempre significa equivocarse. Hay unos ritmos en todo, y los ritmos significan unas determinadas velocidades. Acelerar de pronto, desequilibra al conjunto. A veces, por casualidad, puede salir bien, sobre todo, si el enemigo no está preparado, pero si está preparado puede ir muy mal a los que se aceleran.

Por tanto, tenemos tres elementos a tener en cuenta: grupos de ataque-fuga, línea Maginot y Quinta Columna.

Ahora supongamos y hablo de una experiencia, que el grupo de ataque-fuga se presenta como lo que no es, como un grupo encubierto que parece que quiere engañar al contrario y parecer más cordero que lobo. Lo será en tanto en cuanto. no lo critiquen o lo pongan en evidencia. En cuanto surge una primera línea de trincheras, de crítica, empieza a pensar seriamente en que «lo van a fastidiar» si no decide atacar pronto …. duda, y los otros ponen otra línea de trincheras y otra más y así hasta tener una red de cuatro más o menos. Ya, cuando están construyendo la última línea de trincheras, que aquí había que entender por crítica, el grupo de ataque se enfurece y decide que no se puede permitir y que no se permite la crítica, sino que todos han de acomodarse a las leyes y condiciones del líder y sus secuaces y, en todo caso, que le digan que proponen dentro de esa línea para resolver el impasse que se ha creado con estas fronteras y disensiones … que no permiten augurar nada bueno. La amenaza surje, pero todavía no es más que una gran declaración en la que se dice que o los críticos siguen haciendo las cosas como se les ha sugerido o el líder y su grupo de ataque ….. resolverán las cosas de cualquier forma, por la fuerza, por la imposición, por la arbitrariedad, y basada en la autoridad y la fuerza de que dispone el grupo de ataque, que realmente dispone de un ejército más preparado y disciplinado y ya está: no hay más que hablar. Pero lo cierto es que lo primero que hará el grupo de ataque-fuga es emprender una carrera con el otro grupo más defensivo que ya está en las trincheras -las trincheras no se hacen para atacar, sino para defender mejor-, lo primero será ir forjando otra línea Maginot que se tenga las mismas posibilidades de defensa que la que ha construido los defensivos. De esa forma, irá poniendo obstáculos a cada crítica, con una contracrítica o antítesis suficiente, y liderada por equivalentes al lider de ataque, es decir, otros líderes también de ataque, aunque subordinados al líder principal.

Estamos ahora con una guerra de trincheras, donde casi se pierde el sentido primero que tenían las trincheras que era defenderse. Ahora los dos se defienden y parece que los dos atacan. Pero no es del todo cierto ….. Claro que saber defenderse o repeler al adversario siempre es menos costoso que atacar. En los ataque se pierden siempre más peones que defendiendo, y el asedio, aunque sea muy fuerte, precisa de casi el doble de tropas que la defensa. Y esto es lo que ocurre, el grupo de ataque, que también se ha fortificado con argumentos y no sólo con órdenes, decide, por prisa y por «superioridad» de su posición, atacar, y cuando lo hace sufre muchas bajas -también los otros, pero menos- y se desgasta. Y ahora viene el papel de las «resistencias», de las retaguardias descontentas con el liderazgo de ataque ….. un papel decisivo, porque finalmente es la Quinta Columna la que desequilibra el combate estratégicamente, y a largo plazo, y casi siempre da como vencedor al que no atacaba, pero en un momento determinado, y ante la pérdida de bazas de los atacantes …. y ante su cansancio, decide que está en condiciones de cambiar el rumbo del asunto y en vez de soportar la autoridad, se rebela y ataca a su vez ….. Casi siempre se necesitan personas de afuera para dar energía y vitalidad a los que han defendido, que por supuesto habían perdido o casi perdido y hasta habían sido ocupados, pero habían desgastado ya tanto a los que atacaban que ahora estos empiezan a sentir sus debilidades, y en algunos frentes acaban cediendo ….. Es el principio del fin, porque el grupo de ataque sabe atacar, pero no sabe defender; el líder de ataque-fuga es básicamente ofensivo, y no sabe replegarse, y en el repliegue desorganizado está su propio «sambenito».

La Quinta columna, con la que nadie al principio contaba ….. se ha convertido en el gran aliado. Y la quinta columna no estaba en el frente de batalla, sino que estaba algo afuera, una dentro del enemigo, y otra alejada del frente ….. y observaba con curiosidad y preocupación los acontecimientos. Al final, es la quinta columna la que desequilibra, la que puede hacer síntesis, aunque sean precarias de esa tesis que representa el grupo de ataque-fuga y esa antítesis o defensa que hacen los que montan la línea Maginot. Los terceros así se convierten en los más importantes del juego. Tal vez por eso los espías siempre teman el contraespionaje, y sobre todo, los dobles espías.

Entradas relacionadas

12 comentarios en «Grupo de ataque-fuga, linea Maginot y quinta columna»

  1. No me gustan las guerras, y tampoco los líderes que provocan o asustan con la guerra, por tanto, no puedo ser muy objetivo, en alguna forma tiene que ganar el que no ataca. Y, por cierto, casi siempre es lo que ocurre. Lo que pasa es que a corto plazo, ganan los del ataque, pero casi nunca tienen la constancia ni la necesidad suficientes para persistir en su empeño, y una vez logrados parcial o totalmente sus objetivos, acaban perdiendo los papeles y los que se defendían acaban montándoles un follón infernal. Cuando era joven, viví muy directamente, aunque fuera a través de los medios de comunicación, la guerra del Vietnam …. al final, los USA salieron derrotados. Lo mismo ha ocurrido con la guerra de Irak … y aún encima, han dejado una herencia terrible de distorsión, de disputas, de enfrentamientos, como nunca había habido.

  2. Tampoco me gustan los líderes que se fugan ….. cuando antes han atacado …. y eso, de alguna forma, es lo que han hecho los USA en Irak, y van a tener que hacer en Afganistán. Me dirán que Afganistán es un problema de la ONU, pero todos sabemos lo que es …… aunque nos quieran engañar.

  3. Las resistencias son más persistentes, siempre, que los atacantes … que los ofensivos, que los guerreros …. que al final acaban casi siempre mal. Estratégicamente nunca han ganado, aunque en el corto plazo lo hagan.

  4. Si además, le añadimos un buen «pairing», una pareja de esas que se complementan bien y que logran la idealización ….. del grupo …. los resultados a tres-seis años son buenísimos ….. despues se derrumban, normalmente al pasar la pareja de la idealización a la denigración, del amor al odio, lo que resquebraja el sistema ideológico y debilita el supuesto de ataque-fuga.

  5. En la experiencia que comento, hay una pareja, emparejada también en vida; hay una ideología, aunque sea vivida nostalgicamente por haber sido derrotada en su momento; hay un núcleo que comparte esos sentimientos nostálgicos e ideológicos, y todo ello conforma un grupo de poder muy sólido, que lo hace inaccesible al exterior y que proyecta su ideología y organización y también liderazgo hacia abajo, sin posible contestación o crítica.

  6. Eso crea un halo, un círculo de inmediatos, alrededor de los líderes, que alguien denominó con gran certeza, beatitos ….. que son aquellos que sin la energía de los líderes, aceptan casi sin pensar sus planteamientos. Me recuerda lo que cuenta en «La guerra del fin del mundo» el reciente nobel, Vargas-Llosa, basado en la revolución de los Canudos, en el Sertão nordestino brasileño.

  7. Los beatitos constituyen una gran protección, una línea Maginot, para los líderes, y se escalonan como en todo ejército, ofreciendo distintos niveles y sucesivos de protección al grupo de ataque-fuga.

  8. Sin duda, no todo es coherencia y alineamiento en el grupo que sigue a la pareja de líderes, de tal forma que existen pequeñas fricciones entre ellos, o hasta siempre hay alguno que desentona y que llega un punto en que o bien se va o bien le echa un pulso al líder, igual que ocurre con los animales en la época de apareamiento.

  9. Justamente eso es lo que estaba buscando … un auténtico grupo de ataque ….. y me encuentro con la continuación del anuncio paradigmático de una empresa gallega de distribución, Falemos como galegos …. ahí están las virtudes del grupo de ataque …. un lider …. muchos héroes y un poco de todo … en distintas líneas. Si vemos bien el anuncio, las cinco mujeres se ordenan simétricamente en torno a la más alta ….. y como si fuera en distintos escalores de la línea maginot …. y hasta habrá una quinta columna …. parece ser que el anuncio tiene una segunda parte …. que esperaré con ansia … para ver que hacen las heroinas y el líder.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *