Si, vale la pena ….. verlo y escucharlo hasta el final ….. es algo que todos sabemos, pero que olvidamos demasiado fácilmente.

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2 comentarios en «Vale la pena»

  1. ¡Qué importante es el equilibrio ecológico e igualmente qué importante es saber convivir! Y son cosas que están interrelacionadas fuertemente. ¿Podemos decir que vivimos mejor? Habría muchas respuestas y más que dispares a esta pregunta. En todo caso, hemos perdido, han perdido, todos acabamos perdiendo el sentido de límites, la conciencia de límites. Todo, aunque nos parezca mentira, es limitado, tiene sus límites y las respuestas automáticas a sobrepasarlos una y otra vez y de manera estructural, son hasta desproporcionadas, pues la rebúsqueda de equilibrios naturales también puede ser muy terrible. Ya somos bastante pequeños como para no darnos cuenta de que estamos viviendo muy por encima de nuestras posibilidades, y todo en función de la ambición de toda la sociedad, proclamada a partir de la ideología de unos pocos, unos pocos que se van renovando y que no son siempre los mismos, aunque muchos siguen siendo parte de «los mismos», y que cada día tienen menos conciencia de límites, ya no sólo con la naturaleza, sino y particularmente con las personas … que se tratan como objetos, como «recursos» que dice el video, y si tratamos a las personas como recursos como es que no vamos a hacer lo mismo con todo lo demás. Todos los días vemos esa agresión al medio de una forma intensa, enloquecida, parece que no pudiéramos vivir sin agredir, sin «agredirnos» a nosotros mismos, porque el medio somos nosotros, y nosotros somos los agredidos finalmente por la agresión que hacemos de la naturaleza sobreexplotándola, superando sus límites, tantas y tantas veces …. según explotamos, como sociedad y grupos dominantes con más intensidad el medio y tenemos menos cuidado del mismo, es como explotamos o sobreexplotamos a los miembros de la sociedad y a sus grandes grupos dominados. ¿Cómo es posible que no sepamos comprender algo tan elemental? Claro, para evitar «la culpa» o la «responsabilidad» nos inventamos mil cosas para que «nos justifiquen». Puede ser la religión y sus iglesias, la ideología y sus patrones de afiliación; puede ser hasta la ONU «avalándonos» con programas de Responsabilidad Social Corporativa; puede ser el «extraordinario» servicio que estamos haciendo a la sociedad, haciendo las cosas como las hacemos ….. pueden ser muchas las justificaciones de nuestra conducta. Pero en todo caso, y que quede claro, explotamos, sobreexplotamos, nos pasamos de límites y estropeamos no sólo el paisaje, sino y sobre todo, destrozamos millones de vidas todos los días …. y luego, nos inventamos ONGs y religiones para tapar nuestras malas conciencias y aún encima aparecer como «buenos». Este no es un problema ideológico, es un problema vital, es un tema vital, de la vida misma. Tal vez no conozcamos exactamente la relación entre tal acontecimiento -léase, un huracán o un volcán o un gran torbellino- y otro, ni se puedan demostrar del todo sus interrelaciones, pero si sabemos que estamos «escarallando» el planeta, en toda su dimensión, es decir, no sólo la física, sino la psíquica, mental, de las personas. La agresión sistemática nos hace perder todos los nortes, todas las orientaciones hacia el ser humano, aunque siempre queda un poco de esperanza, mientras existan personas que hayan tomado conciencia de sus límites, de nuestros límites y vivan como hay que vivir.

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