Los franceses son los que nos están representando, los que nos están dando la pauta de lo que hay que hacer ….
Es inaceptable que teniendo los adelantos tecnológicos y sociales que tenemos, y sabiendo tanto como sabemos -aunque sea poco, pero mucho más que hace diez o veinte o treinta o cincuenta años-, sea posible que nos quieran recortar todas las ventajas sociales que hemos logrado conseguir después de tantas luchas sociales. Como es posible que estén destrozando el estado de bienestar sobre el que se edificó Europa después de la II Guerra Mundial, y nos quieran someter a un régimen de falta de libertad y de autonomía, de control y de subordinación, como el que pretenden.
Los franceses son nuestros representantes, ya que nosotros no tenemos ni energía ni ganas ni nada para enfrentarnos a los problemas que nos acucian. Menos mal que la cultura francesa ha estado alerta a las locuras de este sistema capitalista neoliberal, y por lo menos, han podido asustar a todos estos avariciosos, codiciosos y prepotentes dominadores y «empleadores» (sic). Ya nos defendieron de la monarquía, y fueron capaces de sentar el precedente de cortarle la cabeza al rey y a sus cortesanos más influyentes. Después nos sorprendieron con los llamados socialistas utópicos; más tarde con 1848, 1868 y la Comuna de 1871. En el siglo pasado, con su mayo del 68 y con las respuestas anteriores de De Gaulle al capitalismo norteamericano y a su sistema de financiación a cuenta de todos los demás países. Siempre nos hemos beneficiado de la plasmación de su cultura en una protesta adecuada, no en una llamada de atención, sino en una respuesta contundente ante el poder …. en este caso …. del capitalismo màs retrógado y darwiniano que hemos vivido desde principios del siglo XIX. Sigo preguntándome, ¿cómo es posible? ¿Cómo es posible que Wall Street castigue un crecimiento de los beneficios por debajo del 30% y sin embargo, se nos recorten de manera sistemática sueldos directos y sociales? ¿Cómo es posible ….. ? Lo pienso y no lo entiendo. E igual que yo las gentes francesas se preguntan lo mismo, cómo es posible, y en vez de quedarse a pensar y recluirse en sus penas, estan saliendo a la calle y poniendo en temor y en un aprieto al capitalismo globalizador.