Bueno, no todos llegamos tarde, pero dependiendo del lugar, de la cultura y de las formas aceptadas, hay todavia mucha gente que casi siempre llega tarde. Tengo muchas hipotesis para comprender este fenómeno, que sin duda tiene una presencia más evidente en una ciudad como Madrid, donde yo vivo.

Voy a poner primero algún ejemplo de mi experiencia fuera de Madrid, experiencias recientes, por supuesto. Hace unos meses una gente muy bien intencionada y maravillosa, nos convocó a todos los integrantes de un curso de la escuela de Comercio. La convocatoria fue en La Coruña, y la mayoría eran de allí, solo unos pocos íbamos de fuera. Llegué 10 minutos antes de la hora que estaba fijada, y detrás mía creo que llegaron cinco o seis compañeros. El resto, hasta probablemente 50 ó 60 que éramos, estaba ya allí. ¡Había llegado antes que yo …..! Me pareció extraordinario.

Otro tanto me ocurrió en última experiencia en un programa que tuve la oportunidad de realizar en Murcia. Cuando llegué, como siempre un cuarto de hora antes de la hora fijada, estaban todos los que iban a participar, menos dos que se incorporaron casi inmediatamente, y solo en un caso, después de la hora prefijada.

No voy a abrumar mas con ejemplos, ni quiero generalizar. Pero no es la misma experiencia que tengo en Madrid, donde ni haciendo programas especiales, consigo avanzar mucho en que los convocados estén a la hora fijada en un lugar fijado. Siempre hay disculpas, y eso, si llegan. Parece que siempre hay una «buena disculpa» para llegar tarde o no llegar.

Postularé alguna hipótesis para comprender este fenómeno, que yo entiendo muy generalizado y muy aceptado en la «cultura de Madrid». También lo he percibido en otras «culturas» o «micro-culturas» locales, pero no voy a ser machacón con el tema, pero aquellos que lo sufran sabrán a qué culturas me refiero.

Primera hipótesis: En Madrid se llega tarde porque la gente va acelerada y tiene demasiada prisa, si no fuese tan «ambiciosa» y quisiera abarcar tanto, tendría menos prisa y llegaría más pronto. Es una primera hipótesis que alguno de vosotros me dirá que es casi tautológica, porque ¿llegan tarde porque tienen prisa, o tienen prisa porque llegan tarde?. Pienso que llegan tarde porque viven apresuradamente.

Segunda hipótesis (y dejaré alguna más para los lectores o para otro día): Llegan tarde porque no se planifican, no planifican sus actividades y al final, hacen más lo que surge -y como siempre surgen cosas urgentes, finalmente, se llega tarde o no se va-. Vivir apresuradamente dependiendo no de tu propia agenda, sino de lo que ocurre, es horrible. Yo no podría. Tal vez por eso siempre llego a la hora, mejor dicho, diez o quince minutos antes de la hora -prefiero esperar a sufrir que estoy llegando tarde-. Tener tu propia agenda quiere decir que eres independiente, hasta cierto punto al menos, que tienes una vida que eliges, hasta cierto punto al menos, que sabes adonde vas, hasta cierto punto al menos, que vas a los sitios porque es tu voluntad, hasta cierto punto al menos. ………. etc. Bueno, pues en una cultura como la «microcultura madrid», se vive demasiado la «dependencia» del poder -casi de cualquier poder-, se elige poco la vida que uno quiere llevar, se sabe poco adonde se va -aunque se disimula que se sabe- y se va a los sitios mas por obligación que por voluntad o interés. …… Defintiivamente, es un gran problema para los que respetamos a los demás, que otros no nos respeten en la misma medida, o al menos, lo intenten.

Entradas relacionadas

22 comentarios en «Llegamos tarde …… (1)»

  1. Quiero contar que una vez a finales de los años ochenta, y que iba a una reunión internacional de expertos latinoamericanos y que nos reuníamos en Buenos Aires, me llevé -la verdad es que con cierto cachondeo- una sorpresa muy especial. Quedamos unas doce personas para ir al barrio de Boca. Quedamos en el hotel donde estábamos la mitad aproximadamente, a una hora, me parece que era a las nueve, porque pretendíamos cenar y ver un espectáculo de tango. A las nueve, yo y mi compañera estábamos en el hall del hotel esperando. A las nueve y media no había llegado nadie. A las diez tampoco. A las diez y cuarto, llegó uno de ellos, que moraba en otro hotel, y nos saludó diciendo: «buenas noches, ya veo que llego demasiado pronto», lo cual nos alucinó. Hablamos con él y nos manifestó que en su país era común llegar una hora u hora y media más tarde de la hora concertada, y que era lo normal. Fueron llegando los compañeros durante los siguientes 45 minutos. Salimos del hotel a las once de la noche …… es decir, dos horas después de la cita concertada. Seguro que fue algo excepcional, pero es una experiencia muy directa y que me «acostumbró» mal ya para la siguiente cita.

  2. Ah, me sorprendió todavía más porque sólo una de las personas que llegaba tarde se disculpó por su tardanza. Eso también me ocurre frecuentemente en Madrid. No sólo llegan tarde, sino que son incapaces de disculparse.

  3. Hay sitios especialmente lamentables, como son las consultas de los médicos. Los médicos deben pensar que los demás tenemos siempre tiempo para esperar largamente …. aún cuando nos habían citado a una determinada hora, casi siempre, al menos en Madrid, mucho antes, al parecer, de lo seguro que nos podrían recibir. El tiempo que perdemos en las consultas de los médicos es impresionante. Tal vez hasta uno ha tenido que hacer un esfuerzo para llegar a la cita, pero luego esperas media hora o una hora hasta que te reciben, y en ningún caso, te ofrecen una disculpa. Parece que es lo normal y lo aceptado.

  4. También cuando yo estudiaba y aún ahora en muchos casos, los profesors en la universidad empiezan sus clases hasta veinte o treinta minutos después de la hora prescrita. Lo cual me parece un robo y algo lamentable, que da pié a que los alumnos luego entren cuando quieran y estén continuamente interrumpiendo el ritmo de las clases. Un mal ejemplo perdura tiempo; un buen ejemplo se abre dificilmente camino.

  5. Por supuesto, y a veces tengo que sufrirlo. Muchos profesores no saben terminar sus clases e invaden el tiempo de los que siguen. Tengo que suponer que son aquellos que empiezan más tarde de su hora, y que ahora quieren compensar al alumno con una carga añadida que hace que el profesor siguiente tenga que empezar tarde.

  6. Y saco esto, porque es muy claro, para mi que si la gente no llega a la hora es porque ha estado más tiempo del debido con la cita anterior o con la tarea anterior, y no ha sido capaz de dejarla, ya que la había -probablemente- comenzado tardíamente.

  7. Parece que poca gente se da cuenta de la importancia que tiene el respeto a los demás. Y el respeto no consiste precisamente en tener que aguantar, a veces innecesariamente, a personas que hablan y no saben lo que dicen, que tambien, sino en esas pequeñas cosas, como la puntualidad, que hacen la vida agradable y desde luego, menos dependiente de otros, y menos jerarquizada. Nos queda mucho para llegar a la democracia ……

  8. Yo no soy de Madrid; y eso que dices es muy real.

    Yo añadiría otra hipótesis (también tautológica): los madrileños son tan tardones porque el metro vuela. Como creen que el metro les lleva en un periquete de una punta a otra, no se preocupan por llegar a tiempo. Y siempre recibes el mismo mensaje o llamada: estoy en la parada X, llego en nada…esque el metro va de lento… Esa es la buena excusa que utilizan los madrileños conmigo ¿Y a mi que me importa en la parada en que estés? Habíamos quedado hace 15 min..

    Esto en Guadalajara no pasa….. Un beso!

  9. Gracias, Marta, ya estaba empezando a pensar que era solo una mania personal …. porque cada vez que lo comento con gente de aqui, de la que tarda en llegar porque esta en la parada tal del metro, me dicen que soy un exagerado ….. Desde luego, son tan inconscientes de llegar tarde que no les parece una descortesia y una falta de respeto hacerlo. Por lo menos, no se sienten agobiados, como yo lo estaría, pidiendo disculpas por llegar un minuto tarde.

  10. Otra hipótesis mas dura, que alguna vez he pensado con alguna persona, es la que hace referencia a «hacerte menos», es decir, dar por descontado que casi te hace un favor quedando contigo ….. eso me llevarìa a una explicacion basada en la prepotencia que tal vez sea exagerada, pero siempre me gusta alargar la lana ….. si es posible ….. por reflexionar que no sea.

  11. La verdad sea dicha, a los de ‘provincias’ siempre nos ha llamado la atención esa actitud afectada del madrileño al quedar. La expresión con la que responden al justo reproche por un retraso me recuerda a la genial escena de la lista de Schindler, en la que el psicopatita a cargo del campo de concentración, Amon, se queda mirando al espejo, y dice: ‘Te perdono’. ¡so capitalino! ¡que el que llegas tarde eres tú!

  12. El tiempo vale lo que cuesta perderlo. Y el madrileño medio pierde en su vida tanto tiempo en no vivir, que tiene que trivializarlo para no desesperar, vaciándolo de contenido, despreciándolo al estilo del drogodependiente: ‘yo controlo’, ‘esto lo paro yo cuando quiero’, ‘mi tiempo lo controlo yo’

  13. Y lo de las consultas médicas, no tiene perdón, disculpa ni justificación. Puntualmente existen retrasos lógicos, pero la mala planificación de la administración es con mucho la mayor causa de la misma.
    Así estamos, con un retraso medio de citas para consulta de unos 3 meses, un 30% de pacientes que no acuden a la cita programada, huecos sin pacientes a lo largo de la mañana, y a renglón seguido aglomeraciones asfixiantes para todos en las horas siguientes.

  14. ¡Ave Teodoro! Siempre tan oportuno. Estoy de acuerdo contigo que mas iniciativa y responsabilidad no vendria mal, pero no necesariamente eso implica una gestion privada, sino una mejor gestion de la sanidad. Es cierto que lo publico tiende a enquilosarse y no dar respuestas, pero estoy seguro de que se podria formar a los empleados publicos en hacer buenas propuestas que no solo estuvieran movidas por el beneficio o por el interes privado. Tal vez en un pais como el nuestro sea mas dificil, pero tampoco, es cuestion de mentalidad. Aunque por supuesto no quiero entrar en una polemica que ademas es lateral al tema tratado.

  15. Y mira, nunca me habia dado cuenta, porque yo siempre voy a la cita programada, pero es importante ….. claro, y asi los medicos se anticipan y por eso esperamos. O sea que finalmente y precisamente porque gente no es respetuosa con los compromisos contraidos acabamos pagando los responsables de sus faltas de atencion a sus citas y de sus tardanzas …… sin duda, es un gran problema social.

  16. Aunque tambien hay que tener en cuenta que si te citan para dentro de tres meses, necesitaras que la gestion te recuerde que tienes esa cita, por lo menos en ese 30% de personas que luego no van …. pero para eso habra que recordarselo a todos de forma sistematica. Yo apunto mis citas, y luego normalmente las atiendo, pero es cierto que si me las recuerdan, las tengo mejor presentes, es el caso que he visto en la consulta de mi neurologo, y me ha parecido una buena gestion por su parte. Me llama y me recuerda no solo que tengo una cita, sino lo que tengo que llevar para que sea mas eficaz. Estupenda gestion.

  17. Y no me digas que con la cantidad de personas que hay en la administracion con poco trabajo, aun en los hospitales, esa gestion administrativa no podria ser hecha. Seguro que si. Es cuestion de interes y de organizacion. Se evitaria de esa forma que el paciente molestase y que el medico tuviera que prever que el paciente no va a venir …. y citarlo antes para tenerlo esperando. O hasta perder un tiempo precioso que podr´´ia estar dedicando a otra persona.

  18. La contrapartida a «llegamos tarde ….. » es ….. «llegamos pronto». En buenos terminos no se llega pronto, sino a la hora, pues si se llega unos minutos antes, no pasa nada. Hoy mismo, tenia una cita a las 10:30 y me presente a las diez y diez …. a las 10:15 era recibido. Llegar antes puede tener sus ventajas …. porque en este caso, si hubiera llegado a la hora o un poco tarde, hubiera tenido solo un cuarto de hora o como mucho veinte minutos para la reunion, en tanto de esta forma tuve un cuarto de hora mas.

    Pero cuando digo: «llegamos pronto», me refiero a «demasiado pronto». Sin duda mi vida esta llena de llegadas «demasiado pronto»: demasiado pronto a la responsabilidad, demasiado pronto a terminar la carrera, demasiado pronto a introducir algunas nuevas formas de ver las cosas, demasiado pronto …….. Y tiene un gran coste, porque parece que nadie te sigue y que tienes que pararte y realmente te acabas parando, porque nadie te sigue o no encuentras a los que te puedan seguir …. y entonces, te puedes hasta deprimir pensando que nadie te entiende o quiere entenderte. Yo, de todas formas, prefiero llegar demasiado pronto que llegar tarde. Y cuando noto que «voy tarde», en el sentido de que voy desfasado, intento por todos los medios ponerme al dia ….. o al menos, ponerme al dia en eso que he descubierto que «me deja en offside», como se suele decir.

  19. Un amigo mio una vez me digo que era como «speedy gonzalez», ¿recordais el personaje que dio lugar hasta a una cancion? Una vida acelerada, adelantada, la pena es que algun rey del siglo XVI no me nombrara adelantado de Castilla o algo asi …. al menos me quedaria una buena pension y algunas tierras.

Responder a roberto carballo Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *