Hace ya siete años publicaba un libro: “Experiencias en grupo e innovación en la docencia universitaria”.

Ese libro era producto de un gran proyecto, con el Grupo de Colaboradores, que me ayudaron a configurar un proyecto de innovación educativa, que hoy en día ha dado lugar a otras opciones más complejas y avanzadas. En último extremo, las cosas se organizan a partir del tipo de educación recibida, sea en las aulas, en la familia o en la calle. Contribuir a que la educación se haga más compleja y más diversa, más participativa, más cercana, más grupal, más integrada y sobre todo, más adaptada a las necesidades latentes del ser humano, es un buen punto de partida. Si educamos de una forma, seremos de una forma ……

Los procesos de aprendizaje son decisivos en nuestra vida y en nuestra sociedad. Bueno, pues por ahí empecé a disfrutar del mundo de la innovación. El libro fué su corolario, cuando ya había detrás más de quince años de experiencias, sin ningún “ruido”. Entonces, pensamos que podía ser razonable explicar nuestra experiencia. Y así lo hicimos en ese libro. Quería aquí recuperar el prólogo del libro. Saben Uds. que un prólogo se hace una vez finalizado el cuerpo y las conclusiones y hasta los anexos de un trabajo para publicar. Por tanto, expresa muchas veces sintéticamente lo que se quiere y se busca, lo que se pretende, en lo que se ha fracasado y en el horizonte donde nos gustaría encontrarnos. En fin, por qué, para qué, cómo y qué se entrelazan en un prólogo. A mí siempre me gustó este prólogo sobre Sherezade, porque es una figura literaria extraordinariamente rica y que influyo en mi educación y en parte, en mi vida. Ahí va:

APRENDIENDO DE LA EXPERIENCIA Y EN LA VIDA
Dr. Roberto Carballo
Universidad Complutense Madrid

“Un buen maestro es el que sabe extraer
una nueva verdad de un saber antiguo”
Confucio

Scheherazada reeducó al rey Schahriar. En vez de satisfacer directamente su placer con sus encantos e intentar asi aplacar su odio y su sadismo, diseñó y puso en práctica un proyecto, un plan estratégico basado en su propia experiencia, en su conocimiento, en su autoestima, en la escasez, y en su grupo interno. Sherezade era pragmática, un ser práctico, que hizo de su experiencia una bandera no declarada para reeducando al rey evitar la tragedia de otros seres humanos amenazados, y de ese modo, se dio fuerzas para que esa tarea transcendiese lo individual hacia un horizonte social.

Sherezade consiguió que el rey estuviese mil noches escuchando sus relatos, cuentos que eran sugerentes y hablaban de viajes, de historias de amor, de fantasías, …. pero eran prácticos porque captaban la atención y evitaban que el rey entrase en cólera, desvariase y cortase también su cabeza. Eran cuentos de amor y de belleza que sinuosamente evitaban la fealdad, la arbitrariedad, la incontinencia, la inconsciencia, la brutalidad, la injusticia de los actos del rey. Era una especie de lucha por la regeneración social.

El rey recibía lo que realmente necesitaba para regenerarse como persona, lo que precisaba para hacerle superar su frustración visceral por engañado. Al final, su casamiento consigue consolidarse y evitar más daño real.El rey se rinde a la inteligencia y a la pasión de una gran educadora que le hace traspasar los umbrales de su agujero negro y transcender en otro mundo, en otro paradigma, donde las pulsiones y los odios se conviertan en paces y amores.

Sherezade se dotó de una observadora, de su hermana Doniazada, y de un método. La instruye y le dice: “Te mandaré llamar cuando esté en palacio, y así que llegues y veas que el rey ha terminado su cosa conmigo, me dirás: `hermana, cuenta alguna historia maravillosa que nos haga pasar la noche´. Entonces yo narraré cuentos que serán la causa de la emancipación de las hijas de los musulmanes”. La protagonista monta una estrategia, se dota de recursos para conseguir sus objetivos y se anticipa a la realidad. El rey evitaba que la vida continuase. La gran educadora, Sherezade, lo envuelve en un juego diferente, en un juego consciente con muchos ingredientes. Primero, es un espacio coherente con lo que pretende (ataca el problema en su base, pero en vez de hacerlo directamente, lo hace sinuosamente, siguiendo rutas eficaces e indirectas –la línea recta no siempre es la mejor opción para llegar a un punto, al menos en relaciones humanas-).

Después, en lugar vez de intentar satisfacer el deseo, para hacer rebosar su belleza en el balance de la pulsión, aborda su supervivencia como un proyecto, como una estrategia de sueños, fantasías, …. todas inacabadas, al menos, en el momento en que si se acabasen podrían ser un riesgo, por lo que cada noche deja sin finalizar su fantasía, su relato, con lo que el rey presa de la escasez, no puede decidir más que la espera a la finalización del relato.
El aprendizaje es algo inacabado, como los cuentos de Sherezade. Nos marcamos horizontes sólo vislumbrados, pero no alcanzados, porque la ciencia y el conocimiento tampoco están acabados, pero tantas veces se muestra al alumno como una “estazioni Termini”, se le cuenta como lo que ya sabemos, y no como un proceso de construcción que todos los días renovamos.
Sherezade tiene una estrategia, un proyecto, no sólo quiere contar cuentos, sino que lo hace de determinada forma, es sugerente, es exótica, es profundamente atractiva, induce a soñar; ella misma no sueña, pero vive el sueño de/para el otro, intentando sobrevivir. Su pensamiento le conduce, pero pone emoción. La estrategia es decisiva, el método es decisivo. Lo que cuenta también, pero menos. Es más, cuando llega a instalarse en una metodología eficaz, hasta los cuentos empiezan a ser menos interesantes, pero el rey no puede dejar de oírlos –ni tampoco el lector pierde el interés- y poco a poco modera sus impulsos: “ha sido cazado por la razón y por la emoción combinadas” –a través de la razón mostrada con pasión, se le va instalando otra emoción, otro sentir en su cuerpo-.

Sherezade usa de la inteligencia, pero se supone que está tensa, como los días de estreno. Aún así es capaz de superarlo, en ello le va la vida y la de otras muchas mujeres que le seguirán si ella falla, porque lo que le motiva es conservar su vida (hay una extrema necesidad latente, un especie de dinamizador de energía superadora). Sherezade hace que el rey sea el protagonista y al tiempo el cliente satisfecho en sus cuentos. Lo convierte en protagonista porque le habla de lo que no tiene, pero que necesita y se supone que acaba siéndolo una vez reeducado, porque él mismo piensa que lo mejor es quedarse con la cuentista para que siga toda la vida contándole aventuras. Pero el rey es un cliente que todos los días renueva su estado de satisfacción, y a través de ello, transciende sus deseos, sus impulsos, y los transforma en intereses, en razones que le impiden actuar como había establecido como norma arbitraria y sanguinaria. Los alumnos son también nuestros clientes o nosotros tenemos que hacerles caminar hacia ese rol. Lo que salva a Sherezade además de su método educativo, es su grupo interior, los personajes que es capaz de recrear a partir de su propia experiencia y de su invención. Sherezade “trabaja en grupo” su experiencia. Está acompañada de los personajes que crea o que recupera del acerbo cultural de su época. En este sentido es contemporánea de su tiempo e innovadora y a la vez esta en la tradición, en la memoria.

Sherezade es una gran maestra porque facilita, es una facilitadora, no es directiva, sino que sugerente, motiva, impulsa, dinamiza, pero no puede ni es jerárquica, ni autoritaria, facilita un marco en el que se desarrolla su enseñanza. Pero sabe marcar los límites de su enseñanza –cuando cree oportuno, se para y descansa, le da un ritmo a su aprendizaje-, los ritmos de la enseñanza, las pausas y las aceleraciones. Al comienzo hay saber enganchar, pero no exageradamente. Los primeros pasos son decisivos, aún no se tiene la confianza del alumno, pero no se puede empezar demasiado bien y caer pronto en la desgana, es mejor empezar bien y seguir bien, y saber que el alumno va a pasar por determinadas etapas y saber adaptarnos a lo que necesita emocional y racionalmente en cada paso.

Al principio, están las emociones, entonces son convenientes las razones y los horizontes. Luego están las prácticas que convierten emociones en acciones y motivación, las tareas, es preciso guiarlas metodológicamente, enseñarle a las personas a pescar más que regalarles el pescado. Después surgen muchos problemas en el camino, haciendo el camino al andar, es preciso estar ahí cerca y apoyando el proceso –“en las distancias cortas es donde uno se la juega” decía el anuncio-, aportando conocimiento, método, pero no resolviendo los problemas, sino haciendo que el grupo y las personas los enfrente. Y al final hay que saber terminar, es preciso conseguir un espacio donde el alumno se sienta que al tiempo que aporta, y es valorado en su trabajo, puede ser evaluado por los otros, y es parte importante de la educación de los otros.

En el proyecto, todos somos capaces de educarnos, unos con otros, y todos tenemos capacidades y habilidades para hacerlo. Somos profesores y alumnos al tiempo, aprendemos en un proceso continuo y dinámico, en el que el hecho de aprender es contemporáneo del hecho de enseñar: aprender enseñando o enseñar aprendiendo. Pero también podríamos ver a Sherezade como la alumna que aprovecha tiranía del rey como oportunidad de aprender intensamente a partir de su propia experiencia y todo lo que puede aportar la libertad de pensamiento, la iniciativa, el conocimiento de uno mismo. Sherezade puede verse como un símbolo de la eficacia de la libertad y la iniciativa cuando se aplica en situaciones críticas o no tan críticas. La libertad relacionada con la experiencia, la libertad que se une a la iniciativa, y a la aventura; y esta a la tarea, al proyecto concreto.

Sherezade sería una alumna inteligente y no debemos olvidar que otras muchas le habían antecedido y habían muerto, suspendido y quizás también eran seres inteligentes. Si tratamos el tema así se demostraría que la gran mortandad real de la enseñanza tiene que ver con su grado de arbitrareidad, cuando es injusta, cuando no cuenta con los alumnos, cuando no tiene por proyecto más que acumular conocimientos –aquí, muertes-, cuando no se arriesga al error y reproduce lo ya sabido, cuando no da la oportunidad de ser proactivo y tener iniciativa.
Muchos alumnos se escapan de nuestras aulas porque son “sometidos” a unos ritmos tiranos, a unas presiones estresantes, a un desinterés a veces más que evidente, a una arbitrariedad que sólo puede ser sentida cuando no se ejerce, a unos vaivenes continuos, a una especie de ciclotimia educacional. Y como las antecesoras de Sherezade caen ejecutadas por el rey, aquí el sistema educativo, los formatos y métodos donde se valora más el contenido que el continente.
He vuelto a recuperar a Sherezade y a “Las Mil y una noches”, porque me acompaña desde que descubrí en el final de mi adolescencia la edición de Blasco Ibáñez. Ahora he pensado en Sherezade como maestra, porque en último extremo la maestría de la vida está en las mujeres o a mi me gusta representarlo en ellas. He aprendido en/por/para/con/de/gracias a las mujeres que han rodeado mi vida y no creo que sea un caso único de hombre o mujer. Las madres y las mujeres nos enseñan a vivir, a través de la práctica, de lo concreto, de la experiencia, a través de la vida misma. Por eso he querido representarlas como Sherezade, con su sentido práctico, con su visión y horizonte de la vida, con su abnegación por los demás, por su inteligencia, por su memoria integrada en el presente, por su estima, por ser capaz de darlo todo por nosotros sin contraprestación –solo un poco de cariño y un regalito-, por representar la vida y recordarnos lo que somos, por la suavidad de sus formas, por la ternura de sus palabras, por la razón de sus consejos, por el cuidado de por vida, por su amor, … cualidades todas ellas que pueden ser valores que ha de aprender un/a profesor/a si quiere llegar alguna vez a maestro/a.

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29 comentarios en «Aprender haciendo en grupo»

  1. El primer capítulo del libro analiza el punto de partida de la situación educativa. Es cierto que en algo hemos avanzado, pero también en otras cosas hemos regresado. El análisis en lo substancial sigue siendo tan cierto como lo era hace siete años. Es un análisis profundo, comprometido y basado en la propia experiencia y en la experiencia y necesidades de los alumnos-participantes.

  2. El capítulo tercero nos llevaba a los roles del método, es decir, nos llevaba al rol del profesor, a los ritmos, a las oportunidades, y de alguna forma complementaba el capítulo segundo, con las aportaciones de una buena parte del Grupo de Colaboradores, que fueron los que acabaron construyendo cada una de las partes del capítulo.

  3. El capítulo cuarto abordaba las experiencias docentes desde la perspectiva de los que habían sido alumnos-protagonistas de las mismas. ¿Cómo las habían vivido? ¿Qué era para ellos destacable? ¿Qué se podía mejorar? …….

  4. Un epílogo cerraba el libro, sobre la base de preguntarse ¿qué podemos hacer? ¿hacia donde se puede caminar? y ¿hasta donde podemos llegar? Es sintético, pero contribuye a sintetizar el sentido global del libro.

  5. El libro se completa con diez anexos. Algunos apoyan o son base de lo que se desarrolla en el texto principal, y otros son complementos

    Entre los primeros encontramos el I que presenta los resultados de la encuesta permanente de los alumnos y sus respuestas organizadas, que apoyaban las tesis del libro. O el VI y el VII que toman información de otros grupos de alumnos-participantes y la muestran sistemáticamente.

    Entre los segundos, destacan el II y el III que analizan la experiencia del grupo de colaboradores, el X centrado en la metodología de grupo de trabajo operativo, y otra serie de ellos intermedios que complementaban con metodologías para integrar personas o para hacer grupos pequeños y ponerlos en marcha.

  6. El libro es muy barato. Fue editado por la Editorial Complutense en 2002 y le aportamos para su publicación más de 700.000 pesetas que nos habían concedido para desarrollar el proyecto la Universidad Complutense en su programa de innovación educativa. Total que sigue costando 6 euros por un libro de 200 páginas en letra bastante pequeña.

  7. Lo cierto es que la editorial no supo distribuirlo, pero ha sido base para la formación de profesores durante los últimos años. Para mí ha sido de una grandísima utilidad, y los profesores que han tenido la oportunidad de leer parcial o totalmente su texto, han encontrado muchas salidas y oportunidades para aplicar en sus proyectos docentes. También muchas razones para hacer las cosas de otra manera.

  8. El libro fue coordinado por mí, y a mi trabajo se debe más del 70% del texto final, pero la participación de miembros del Grupo de Colaboradores y hasta de alumnos fue muy importante. Quiero aquí citarlos: Margarita Alonso, Carolina Bautista, Eva Carballo, Gracia Coronado, Yolanda Espinosa, Omar de León, Teresa Navarro, Nuria Ortega, Maribel Pradillo, Dolores Pujol y Rafael Varas eran quienes me acompañaban en este proyecto. Todos ellos trabajaron en el Grupo de Colaboradores durante varios años, algunos desde su puesta en marcha a mediados de los años ochenta, como Gracia, Omar y Maribel, y otros se fueorn incorporando sucesivamente, y mantuvieron su vocacionalidad al servicio de un gran proyecto, que fue grande gracias precisamente a ellos.

  9. Detrás del libro también estaban los cientos de alumnos, en realidad miles, que han pasado por mi asignatura en aquellos veinte años de experiencia. Calculo que más de dos mil, tal vez tres mil. Ellos fueron los que me motivaron y me enseñaron a hacer las cosas mejor. Porque para aprender hay que saber analizar los errores y aprender de ellos. Y sin un referente, tendemos a dejar los errores en el baúl de los recuerdos, pero todos los años había que dar respuesta -no a los mismos alumnos, pero sí a la nueva generación- y no podíamos seguir cometiendo los mismos errores, sino aprender y aprender de ellos para forjar nuevos elementos innovadores en los proyectos docentes.

  10. Así ha continuado siendo igualmente después de la publicación del libro. Yo diría que hasta se ha intensificado el proceso de introducción de mejoras e innovaciones docentes en mi asignatura, porque la experiencia y la madurez, cuando se convierte en conocimiento, da nuevas alas para atreverse a más. Y en esas estamos. Han pasado siete años, y aunque seguimos en las mismas bases conceptuales que se han profundizado, hemos aprendido mucho durante este período, y sobre todo, me he atrevido a escribir y a escribir sobre el tema, porque ya «podía escribir», empezaba a saber que aún no sabiendo nada, sabía algo, eso precisamente.

  11. En 2003 publiqué un artículo en la Revista de Investigación e Innovación de Madri+d que mostraba algunos aspectos emergentes que podían facilitar los procesos de aprendizaje: «De los inhibidores a los sublimadores» -el título era más largo, pero no me acuerdo ni tengo ganas de buscarlo ahora-, se puede encontrar en la página de la revista. Solo hay que poner revista madri+d en google, y luego hacer una búsqueda interna por inhibidores o sublimadores, es fácil de encontrar.

  12. En 2003 comencé a formalizar ciclos y seminarios-talleres para profesores universitarios. Comencé por uno que resultó posteriormente ser muy importante en este proceso, encargado por los responsables del Instituto de Ciencias de la Educación de la Complutense. De ahí nació el Grupo Interdisciplinario que ha venido funcionando en los últimos años, un grupo de profesores de diferentes facultades y hasta de dos universidades que ha dado un paso más amplio para generalizar las formas de innovación educativa, bajo un modelo humano y responsable, de gran participación y grupal.
    Posteriormente a 2003 hubo otros muchos seminarios-talleres y ciclos de innovación en diferentes universidades y en las facultades de nuestra Universidad.

  13. En 2005 publiqué: «Aprender haciendo en grupo» conjuntamente con otros profesores en un libro: «Iniciación a la docencia». Ahí se intentaba sintetizar el planteamiento global de la metodología que habíamos desarrollado.

  14. En 2005 también montamos una web de recursos y experiencias (http://www.innovacioneducativa.net/), y también hicimos el I Encuentro de Experiencias Grupales innovadoras, en el Campus de Somosaguas, y con más de 120 profesores participantes. Un encuentro que se caracterizó como los otros dos que hemos puesto en marcha, por su horizontalidad. Vamos allí no a contar las cosas y que otros nos escuchen, sino a escuchar y a participar todos, todos los que van al Encuentro. Por eso es un encuentro y no un congreso.

  15. En 2007 se publicó un DVD: «Metodologías y Experiencias para la Innovación Educativa», donde se sistematizaba el método de trabajo y aplicación en el aula, y las experiencias que ya amparaban dicha orientación. Supuso un trabajo muy importante para nosotros mismos, y se publicó como DVD a finales del año. Mientras tanto, el blog estaba muy vivo como lugar de intercambio, y la web recibía cada vez más visitas, siendo recomendada en muchos foros de internet.

  16. En 2007 comenzamos un programa sistemático de investigación sobre lo que pensaban los protagonistas-alumnos, expresando sus necesidades y sus experiencias en la universidad y antes de entrar. Se estableció un plan de trabajo y de investigación, y conseguimos una gran cantidad de información al respecto. Ese plan era en realidad una continuidad del que habíamos hecho antes de publicar el libro «Experiencias en Grupo e Innovación ….» (2002). Lo nuevo era el planteamiento mucho más sistemático, y la participación que ahora no se hacía sólo en una asignatura, sino en varias.

  17. En 2007 también montamos el III Encuentro, que tuvo una singularidad sobre los dos precedentes, hubo un foro paralelo para participar los alumnos. Los dos foros empezaron juntos -profesores y alumnos-, se desarrollaron en mesas paralelas y luego los profesores escuchamos a los alumnos y ellos a nosotros. La experiencia fue muy buena y sólo la falta de apoyo institucional hizo que no se difundiera lo suficiente y no pudieran participar más personas interesadas. Aún así fuímos más de setenta los participantes.

  18. El curso 2007-08 fue provechoso en la aplicación del plan de investigación. Fuí el primero en probarlo y los resultados han podido finalmente ser trabajados durante 2008 y publicados después de un año de terminados, en 2009. Ahora espero que se publique (en este momento parece que están encuadernando el libro, o sea qu eya está casi en la calle) «Manifiestos para la Innovación Educativa» (2009) Editorial Díaz de Santos.

  19. Roberto, me abrumas pon tu productividad. ¿Has pensado incorporar un lector de feeds rss a tu blog, para poder seguirlo desde cualquier lector? Un saludo

  20. De todas formas, los fines de semana tengo bastante tiempo para dedicar a esto que me gusta mucho. Me encanta escribir sobre lo que sé, comunicarlo y que otros compartan conmigo sus aprendizajes y su memoria. ´Te agradezco enormemente tus aportaciones y espero que pronto podamos reencontrarnos …. una de las mejores cosas que me ocurrió ahora casi un año fue conocerte, allá por Albacete …… a mitad de camino. Un abrazo.

  21. Como sé que me sigue, aunque supongo que no de una forma exhaustiva, se lo voy a volver a pedir: PACO, PACO SADURNÍ, POR FAVOR INCORPORA UN FEED RSS EN MI BLOG, ME LO PIDE TEODORO, Y TIENE RAZÓN, VENGA, HÁZMELO, YA SÉ QUE TIENES MUCHO TRABAJO, PERO DEDÍCAME SÓLO UN POQUITO DE TU TIEMPO.

  22. En realidad, la intención de discutir la entrada del blog es increíblemente realista. Puedo optar por escuchar algo totalmente nuevo con esto a causa de que realmente proporciona el mismo sitio dentro de mi Estados Unidos durante esta materia por lo que esta ayuda específica ? Mucho tod @ s . Tuve la oportunidad de una buena mirada sobre el tema más notó un gran un número de blogs , pero en contraste con eso. Gracias por revelar tanto dentro https://www.robertocarballo.com te deseo suerte

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