Suerte

Nunca he sido partidario ni «creyente» en la suerte. La suerte hay que conseguirla, es decir, que hay que trabajarla y muchas veces no nos es favorable, como quisiéramos, y como alguna vez las cosas tienen que salir bien, le llamamos suerte, por qué? que tontería. Las cosas salen bien cuando uno se prepara para ello, y aún así hay veces que no salen, muchas más de las que salen, y a eso me niego a llamarle suerte. Es cierto que algunos obtienen resultados sin esfuerzo, o al menos, eso parece, pero tampoco es un buen camino. El camino es el esfuerzo continuo, el riesgo permanente a equivocarse, las ganas internas de seguir y seguir aprendiendo. Pensando así pocas veces he jugado a la lotería o a las quinielas o en un casino, y digo pocas veces, porque «nobody is perfect», y alguna vez bien por efecto social o bien por alguna gana interna de probar «mi suerte», lo he hecho, aunque sin mucha convicción. La buena suerte se busca, y debería estar prohibida la buena suerte para quiénes no saben merecerla, y para mí, merecerla es buscarla, es saber conservarla, es saber donde está uno en cada momento, sin que eso significa excesiva preocupación, sino sencillamente saber vivir …… pero sabiendo que la vida es sobre todo esfuerzo y búsqueda, y no espera y pensar en hacerse rico porque le ha tocado a uno la lotería. Algunas veces he comentado en mis clases que si me tocase la lotería -si jugase, claro- seria un gran problema para mí, porque el dinero cambia a las personas, aún a aquellas que están formadas para tenerlo, que no creo que sean muchas o casi ninguna. Cambiar la vida, cambiar mi profesión, disfrutar de las cosas como si no me costaran trabajo conseguirlas, vivir de esa manera, sería un gran fracaso personal para mi, sería como renunciar a ser yo mismo. Me prefiero como soy, un proyecto de buen profesional, y un indagador de nuevas rutas, y al tiempo, recuperador de lo todavía desconocido por mí, y es tanto lo que hay que ver y averiguar, que no voy a tener tiempo, seguro, para alcanzar ni siquiera el punto de partida.

Para no amargar a los lectores, les presento a una cantora excelente brasileña, que muchos no conocerán, Vanessa da Mata, hace años que me mueve en el MBP procedente del «Mato Grosso», que como habrán imaginado es una zona de mato (matorral) grosso, es decir, grueso ….. y un Estado del sudoeste de Brasil.