«Los hombres pueden soportar que se elogie a los demás mientras crean que las acciones elogiadas pueden ser ejecutadas también por ellos; pero en caso contrario sienten envidia.» dice Tucidedes.
Recuerdo que me empezaron a enseñar a bailar un bolero con esta canción, aunque no cantada por Machín, sino por una orquesta fiestera en el barrio de la Falperra, en La Coruña.
Un ejemplo muy ilustrativo sobre este tema:
«Una serpiente estaba persiguiendo a una luciérnaga. Cuando estaba a punto de comerla, esta le dijo: «Puedo hacerte una pregunta?». La serpiente respondió «En realidad nunca contesto preguntas de mis victimas, pero por ser tú te lo voy a permitir». Entonces la luciérnaga pregunto: «Yo te hice algo?», «No, respondió la serpiente». «Pertenezco a tu cadena alimenticia?», «No, volvió a responder la serpiente». «Entonces, por que me quieres comer?» inquirió el insecto. «Porque no soporto verte brillar», respondió la serpiente.
Una puedra con poderes ocultos para combAtir este mal:La HEMATITA
(Contra la envidia y la agresión psico-física).
Una buena ilustración