2 comentarios en «Remar contra corriente»

  1. Tengo que reconocer que me gusta remar contracorriente, y además, es más divertido. Nadie que sepa navegar cambiará una ceñida y sus sensaciones por una empopada, aunque esta última le de más velocidad, pero la única emoción que uno puede conseguir es marearse ….. La vida es contracorriente, en el sentido de que si no existe crítica, si no existe respuesta, es como si nos quedásemos paraditos …… como muertos. Se necesita una respuesta que sepa integrar lo ya sabido, que sepa valorarlo, que sepa partir de ahí para ampliar el punto de partida. Es asombroso Paulo Freire. Esta es probablemente una de sus últimas entrevistas, antes de dejarnos. Su optimismo es contagioso, su rebeldía es contagiosa, sus expectativas y el sentido de la vida que impregna, es más que contagioso, es admirable, es un ejemplo, es Paulo Freire.

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