No encuentro una explicación plausible observando a los jerifaltes mundiales diciendo que no pasa nada, y que nosotros estamos mucho mejor que los demás y que tenemos instrumentos económico-financieros mucho más potentes. Lo dicen, y yo me pregunto: ¿se lo creen? Espero que no, porque sería el colmo que no tuviesen «mieditis aguditis», con la que está cayendo. Creo que era Murphy, y sino no hay problema siempre se le atribuye, que lo que va mal, acabará peor. Pues eso, después de casi veinte años de ciclo expansivo generado por una integración de desregulaciones, neoliberalismos, privatizaciones, guerras, deslocalizaciones y otras mandangas, el ciclo se ha cansado, y cómo se ha cansado.
Hemos cogido la onda al revés, y ahora nos vamos hacia el desagüe. Estábamos muy mal acostumbrados, pero sobre todo las grandes corporaciones, los propietarios, los empresarios, en fin, la gente que invierte y nos organiza las vidas. Ahora quieren hasta un «paréntesis» de la economía de libre mercado, y curiosamente piden más privatizaciones y más desregulaciones, ahora de mercados en manos públicas, más áreas de negocio, de las buenas, de esas que dan pasta. Todos piden dinero a los ciudadanos, que no son los que lo dan, sino a sus representantes, a los políticos, que probablemente lo den, pero no es suyo, es nuestro.
Lo que más me sorprende, una vez más -la verdad es que soy un pobre ingenuo- es que sigan pensando que todo está «atado y bien atado», como los buenos dictadores. Pero no, lo siento, no lo está. Las cosas han cambiado, los centros de gravedad también, y los que deciden, aunque han acumulado mucho mucho dinero, no pueden decidir tanto, porque todo ha quedado o casi todo es «mano invisible» que diría Adam Smith. Los Estados están rebasados por la globalización, en realidad, sólo pueden tapar huecos, también la UE y también los USA, si, tapar huecos. Resulta que para apoyar a AIG, la aseguradora, la FED ha entrado casi en bancarrota y ha tenido que pedir más fondos, que supongo que tendrán que sacar de darle a la máquina de hacer dinero, que es casi siempre el último recurso. O sea que si la FED está en dificultades, ya me dirán.
De todas formas, perdonen que insista, pero lo que menos comprendo es como quieren convencernos de que las cosas están controladas y no pasa nada. Ahora es cuando saldrán todos los agujeros negros que no hemos querido ver en estos años, y los que sobrevivan no serán los mejores, sino más bien los peores, los que han sabido colocarse más cerca del poder. Estos días leía el manifiesto Cluetrain, es curioso, es idealista, es también realista en cierto modo, lo recomiendo, sirve para que pensemos lo que es posible, pero sin los poderes que nos impiden vivir, y en vez de aceptar lo necesario, se convierten en obstáculos del desarrollo del ser humano. Por cierto, no se aburran con tantas claves, creo que son 95, y tengan en cuenta que hasta algunas parecen repetidas, pero los matices del manifiesto son interesantes y se parece a mucho de lo que ya está pasando en ciertos ambientes, y de lo que puede pasar de forma más general dentro de poco. Claro que la depresión frenará todas estás iniciativas y tendremos que dedicarnos nuevamente a reconstruir la acumulación capitalista, para mejor gloria de los que seguirán mandando.
Por cierto, con mucho más peso técnico podéis adentraros en la web de Juan Torres que continuamente nos reintroduce en situaciones bien comentadas críticamente.