Innovación: ruedas (vivurbanas 4)

Ha sido una odisea que no ha terminado, pero que me va a costar, con estos calores, algún que otro kilo, menos mal. Hace unas semanas comenté con uno de mis hijos que tenía que cambiar las ruedas del coche. Había preguntado en talleres del barrio y me había parecido muy caro. Me pedían algo así como 220 euros por dos ruedas. Total, que mi hijo me convenció de que era mejor pedirlas on-line porque salían más baratas, y yo, que me gusta buscar rutas raras, me dije, bueno, y las pedí a una casa. Las ruedas tardaron 20 días en llegar, hoy han llegado. Me han costado 130 euros, pero hay que instalarlas, me fuí a un garage recomendado y me costó 65 euros ponerlas. El garage estaba al otro lado de Madrid. Total, que un gran negocio, pero no sé para quién.

(Innovación– Aldebaran Innovation)
He comprendido el tema. Los garages tienen que tener así menos ruedas en stock, es eso de stock cero; y nosotros nos líamos esperando en casa las ruedas, llamando, yendo al taller, esperando para que las pongan, y aún encima he comprado unas ruedas de nombre desconocido, aunque sí, me han dicho que son tan buenas como las de las marcas conocidas.

Hace tiempo que pensaba que las cosas caras eran más baratas, y sigo pensando igual. Son más baratas porque no dan tanto trabajo, no se estropean, duran más y sólo el capricho del que las compra, que quiere comprar otras, las hace caras, porque en realidad, podrían servir, en la mayoría de los casos para siempre. Menos mal que es para un coche que el pobre ya me ha dado el buen resultado de las cosas buenas: un toyota celica, estupendo, del que me olvido hasta de cambiarle el aceite. Yo creo que no lo necesita. Tiene 170.000 kilómetros y sólo se le notan en la tapicería y algo en el motor, pero nada, sólo unos veinte kilometros de punta. Menos mal que nos queda toyota.

Entradas relacionadas

2 comentarios en «Innovación: ruedas (vivurbanas 4)»

  1. A veces lo que nos parece caro es un ahorro de paciencia y tiempo. Para mí siempre ha valido la pena pagar un poco más, así evito enfados y exceso de trabajo porque al fin y al cabo terminamos por pagar lo mismo o casi lo mismo. Pero lo que a veces me planteo es ¿qué estamos haciendo con el tiempo que ahorramos con servicios facilitados y tecnología? Porque lo que parece es que cada vez tenemos más tecnología a nuestro servicio y mucho menos tiempo del que teníamos antes, por no hablar del dinero, claro. ¿Por qué tenemos la impresión de que siempre nos falta tiempo?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *